LA VERACRUZ TRAE A CUENCA LA LLUVIA

El Lunes Santo para Cuenca, es un día solemne, hoy toca la Hermandad del Santísimo Cristo de la Veracruz. El Cristo es una imagen en el momento de la expiración, de finales del siglo XVII, de autor desconocido, de la escuela madrileña. Recibe culto en la Iglesia de San Pedro, junto a una Dolorosa, del siglo XVIII, de la escuela granadina, que en estos momentos no procesiona. La Hermandad se creó en 1995 para dotar de un desfile al Lunes Santo, rescatando una Hermandad antigua, que procesionaba el Jueves Santo, siendo la advocación al Cristo de Veracruz del siglo XVI.



Los penitentes visten túnica, capuz (de terciopelo), guantes y zapatos negros, y portan hachón de cera.

Es tradicional que los hermanos cófrades antes de salir escuchen misa oficiada por el Obispo y besen la reliquia de la Cruz del Cristo.

Este año poco antes de salir la procesión ha comenzado a llover por lo que se aplica el protocolo de lluvia, esperar media hora, hasta las 22:30, si sigue lloviendo se espera hasta las 23:00, y si siguiera lloviendo, se suspende el desfile. Un desfile que da una vuelta por la girola de la Catedral antes de comenzar, pasa por la Plaza Mayor, Alfonso VIII, Andrés Cabrera, calle del Peso, Solera, baja por Alonso de Ojeda, a la Puerta de Valencia, para llegar por las Torres, hasta San Esteban donde finaliza. Van comentando las siete últimas palabras de Jesucristo en las Iglesias que encuentra a su paso, en concreto la propia Catedral, Las Blancas, San Felipe, San Andrés, El Salvador, Concepcionistas, y San Esteban.

Sólo acompañan al paso un tambor velado y una campana. Este año, acompañan a la Cofradía las Hermandades homónimas de La Peraleja, y de Villar de Domingo García. Como novedad este año, la Cofradía estrena incensario de orfebrería, y gualdrapas delantera y trasera confeccionadas en el taller de bordado en oro "San Julián".

El cortejo está a punto de comenzar, y encienden la luz de los hachones, y la Cofradía da la vuelta a la girola de la Catedral para situarse por la Puerta de la Piedad, desde donde saldrá el desfile, mientras recorre el interior de la Catedral, se canta al Cristo.













Hemos salido de la catedral, y nos encontramos con la primera palabra: "Padre, pérdonalos porque no saben lo que hacen". 





La procesión para en los Arcos, llueve, se reúne el presidente de la Junta de Cofradías con el Hermano Mayor de Veracruz. Deciden continuar. Es el turno de la segunda palabra: "En verdad te digo, hoy estarás conmigo en el paraíso". Jesús muere por nosotros, y tiene el poder de resucitarnos con él, eso se llama fe, Jesús ha prometido felicidad, descanso y gozo al malhechor arrepentido, que reconoce a Dios y reclama misericordia, eso es lo que debemos hacer reconocer nuestros pecados, pedir perdón y reconocer el poder de Dios, la súplica tendrá promesa, sin súplica ni arrepentimiento estamos vacíos y perdidos. Señor, ayúdanos a heredar la vida eterna.



Sigue bajando la procesión, canta el Coro Alonso Lobo. Mucho público en las aceras, y sobre todo detrás del paso. Llueve intermitente, se nota la humedad, es Lunes Santo, Cuenca llora sobre el Cristo de la Veracruz. Y llegamos a la tercera palabra, en el Oratorio de San Felipe Neri: "Mujer, ahí tienes a tu hijo, hijo, ahí tienes a tu madre". 











El desfile se aleja del Museo de la Semana Santa, hacia la Puerta de San Juan. Cuarta palabra en la antigua iglesia de San Andrés: "Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?". Y en San Felipe tiene lugar la quinta palabra: "Tengo sed". El Señor tiene sed de familias y corazones sencillos. La fe calma la sed con la eucaristía.



La sexta palabra tiene lugar en el Monasterio de la Inmaculada Concepción, y reza así: "Todo está cumplido·.  Avanza rápido el desfile por Las Torres, y Aguirre, para terminar dentro de la Iglesia de San Esteban. Al llegar a ésta, tiene lugar la séptima y última palabra: "Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu". El centurión se hizo creyente ante el grito del Señor, Jesús sabía muy bien que las llaves que abren los corazones es el amor, que nos emociona, siendo la primera señal de transformación. Se introducen los hermanos en la Iglesia de San Esteban, mientras el Coro Alonso Lobo sigue cantando.













A continuación se muestra el enlace con el álbum de fotos que recoge la mayor parte de instantáneas que ha ido publicando durante el recorrido procesional. Y hasta aquí hemos llegado, mañana estaremos con el Medinaceli y Esperanza.



Comentarios

Entradas populares