LUZ Y VIDA RECORRE VIRTUALMENTE EL CAMINO ENTRE LA CATEDRAL Y EL CEMENTERIO

 Sábado 4 de abril de 2020. Sábado de Pasión, en la Plaza de la Catedral, a las 20:00, debería estar a punto de salir la Hermandad de Luz y Vida, una Cofradía que homenajea a aquellos que ya no están  con nosotros, ausentes por fallecimiento. Hoy homenajeamos a todos los fallecidos por el coronavirus.


El titular de la Hermandad es un Cristo de pie con las manos desplegadas a la altura de la cintura, en situación de oración. El autor es Hipólito Pérez Calvo, quien la talló en 1988, en madera de tilo, y la portan 60 hermanos.

Los cófrades llevan hábito de una sola pieza, estilo cisterciense, de color hueso, y llevan colgada la medalla de la Hermandad, portan un farol eléctrico.

Una Hermandad que antes de salir realiza un acto de oración en el interior de la Catedral, aunque hubo años que se realizaron en el atrio, se decidió volver al interior.  Tras el barandales, y una cruz que la llevan varios hermanos en horizontal, sale un paso con una Cruz y una corona de flores, que es depositada en el camposanto junto al Crucero del Cementerio, en un acto en el que se lee el evangelio de la Pasión, se realiza una oración y el coro canta "De Profundis", mientras toca el cuarteto de Cámara que le acompaña.

Este año, pese a que no podremos ver en las calles de Zamora al Jesús de Luz y Vida, ni a sus 250 hermanos que suelen procesionar, de los más de 750 que tiene, ya ha sido depositada la Corona junto al Crucero del Cementerio.




Aquí puede verse el canto del "De Profundis", en el acto del pregón de la Semana Santa de 2019:




Pese a que este año el recorrido estará vacío, y nuestros corazones palpitarán al ritmo de las imágenes que les mande el cerebro, al ritmo de los tambores que acompañan al paso del Cristo de la Luz y Vida, recogemos imágenes del video de la procesión que el canal local La 8, de la televisión regional autonómica de Castilla y León, emitió en abril de 2019.

















 
















Y tras la procesión comemos unas ricas torrijas en alguna de las cafeterías de Zamora, este año, tendrán que ser en casa, para lo que ofrecemos la receta de tan ricos manjares típicos de estas fechas, para ello necesitamos 1 barra de pan duro, 1 litro de leche, 1 limón, 3 huevos, miel, 2 ramas de canela en rama, aceite de oliva, canela molida y azúcar.

Colocamos en un cazo con leche al fuego, añadiendo corteza de limón, un par de ramas de canela y una cucharada de canela en polvo, cuando empiece a hervir, colaremos la leche y la dejaremos enfriar. Cortaremos rebanadas de pan, las dejaremos en una fuente honda, y vertemos la leche fria que cubra las rebanadas, después de unos minutos empapadas, las dejaremos en una sartén, a la que añadiremos los huevos batidos friéndose a gran temperatura con abundante aceite. Las sacaremos y las pondremos en un papel absorbente para que filtre la grasa, pudiendo rebozarlas en canela, miel, leche, azúcar, o almíbar.

Vaya ahora la reflexión para esta Semana Santa tan atípica, todavía estamos al inicio de la misma, mañana empiezan la celebración de la Pasión, Muerte y Resurrección, con el Domingo de Ramos, en el que celebramos la Entrada de Jesús en Jerusalén. Mañana debería ser día de alegría, especialmente para los más pequeños, y todos deberíamos engalanar casas y balcones con las palmas del Domingo de Ramos, que es algo que podemos hacer pese al confinamiento decretado por el estado de alarma. Pero la Borriquilla no la veremos por las calles, por eso es importante que acojamos a Jesús en nuestros corazones, que los abramos de par en par y que ofrezcamos a Jesús morada junto a nosotros, es un día de alegría, el Mesías está a punto de llegar a Jerusalén, y con él vivamos estrechamente estos días de Pasión, que le llevará irremediablemente el Viernes Santo a la Muerte en la Cruz.

Decía ayer, que para un católico es más fácil esta serie de símiles, oraciones y propuestas, pero que la Semana Santa tiene que ser un momento puente entre culturas, entre hombres de distintas ideologías y sentimientos religiosos. Para el agnóstico también es Domingo de Ramos, y mañana no podrá ver los enseres y estandartes de colores de la Cofradía de la Borriquilla, ni las túnicas blancas con la capa morada, mañana el Museo de la Semana Santa de Zamora permanecerá cerrado, pero en su interior, la Borriquilla es la protagonista. Para el agnóstico, podrá recordar los Domingos de Ramos que ha vivido, y que vivirá a partir de la Semana Santa de 2021, y hacer proyectos para el futuro, cuando el estado de alarma se levante, que cada vez queda menos.

Para todos, especialmente para hacer con los más pequeños, un taller de hacer palmas, para mañana Domingo de Ramos, no es religión, es arte:














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